El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha impuesto la Cruz de la Orden de San Raimundo de Peñafort a una decena de registradores de la propiedad y mercantiles en un acto que ha contado, asimismo, con la presencia de la subsecretaria del Ministerio, Áurea Roldán, el director general de los Registros y del Notariado, Javier Gómez Gálligo, y el decano-presidente del Colegio de Registradores de España, Gonzalo Aguilera.
Ante una amplia representación de familiares y registradores de toda España, y tras subrayar los servicios al Derecho prestados por los condecorados que “les hacen merecedores de la máxima distinción en el ámbito jurídico”, el titular de Justicia repasó las reformas acometidas en la X legislatura “enfocadas a mejorar nuestro marco jurídico, fomentando y fortaleciendo el sistema de seguridad jurídica preventiva y el papel de los registradores, y sobre todo a facilitar el servicio público a los ciudadanos”.
El director general de los Registros y del Notariado puso el acento en “la baja litigiosidad del sistema registral, del sistema inmobiliario español en el que la conflictividad no llega al 0,1% de todas las transacciones inmobiliarias”. Para Gómez Gálligo “el prestigio de la institución no se sostendría sin las personas que lo conforman y los nueve registradores condecorados constituyen el tracto sucesivo de las distintas generaciones que han mantenido el alto prestigio de la institución registral”.
El decano autonómico de Madrid, José Félix Merino Escartín, fue el encargado de agradecer la entrega de la distinción, en nombre de todos los condecorados, con un discurso en el que también repasó los retos a los que, según dijo, se enfrenta la profesión registral como son “la plena adaptación a una sociedad cada vez más tecnológica dentro de una segunda revolución de Internet pero en la que debe mantenerse la función humana como decisoria; salvaguardar los intereses públicos y particulares trabajando en la delimitación territorial de las fincas; incrementar la comunicación con los ciudadanos usando los medios de la sociedad de la información y defender a los consumidores preservando al mismo tiempo el crédito hipotecario en beneficio de todos”.
Los registradores de la propiedad y mercantiles que recibieron la Cruz distinguida de primera clase de la Orden de San Raimundo de Peñafort fueron:
- Luis Antonio Gallego Fernández, registrador de la propiedad de Padrón y director del Servicio de Sistemas de Información del Colegio de Registradores.
- José Ángel García-Valdecasas Butrón, registrador de bienes muebles central
- Juan José Jiménez de la Peña, registrador de la propiedad de Madrid Nº 6.
- Juan José Jurado Jurado, registrador de la propiedad, mercantil y de bienes muebles de Sevilla.
- José Miguel Masa Burgos, registrador en el Registro Mercantil Central I y director del Centro Registral Antiblanqueo
- José Félix Merino Escartín, registrador de la propiedad de Madrid Nº 18 y Decano autonómico de Madrid.
- Mª Luz Sánchez-Jáuregui Lázaro, registradora de la propiedad de Toledo Nº 2.
- Fernando Trigo Portela, registrador de la propiedad de Alicante Nº 3.
Asimismo, Jacobo Jesús Fenech Ramos, registrador de la propiedad de Adra, recibió la Cruz de segunda clase.