Una planta baja cuesta un 45% menos que un ático, un inmueble que supera el valor de los pisos bajos en un 81%.
Madrid arroja la mayor brecha entre ambas tipologías, pues el precio de los áticos está un 141% por encima del de los bajos.
El atractivo de los áticos dista mucho de la capacidad de atracción de los bajos. El portal inmobiliario www.pisos.com enfrenta estas dos tipologías con el fin de conocer sus principales rasgos. El ático tipo en España tiene un precio de 255.514 euros y 102 m², mientras que en 2015 esta vivienda costaba 264.947 euros y tenía 112 m² de superficie, lo que arroja una caída del -3,56%. En cuanto al bajo estándar, el precio medio actual se sitúa en 141.093 euros por 92 m². En el ejercicio anterior, la relación fue de 146.845 euros y 91 m², arrojando una bajada del -3,92%. En cuanto a la distribución, se repite la misma norma en ambas tipologías frente al año pasado: dos habitaciones y un baño.
El comprador que desee disfrutar de buenas vistas deberá gastarse un 81% más que aquel que se conforme con la planta baja, un porcentaje un punto superior al del año pasado. Por su parte, los bajos siguen siendo un 45% más baratos que los áticos. En cuanto al peso de ambos tipos de vivienda dentro de la muestra del portal, la presencia de bajos en la oferta continua duplicando a la de los áticos, representando un 10% y un 5% sobre el total de anuncios publicados en venta, respectivamente. Esta relación fue del 8%-4% en 2015.
La superioridad del ático frente al bajo es un hecho de sobra conocido por los actores que operan en el mercado inmobiliario. “La oferta de últimas plantas es muy escasa, lo que no favorece que sean precisamente asequibles”, revela Miguel Ángel Alemany, director general de pisos.com. “Ser propietario de un ático es sinónimo de exclusividad, un sueño que se cumple tras una carrera de fondo, es decir, una vez que se ha alcanzado cierta madurez patrimonial”. Por su parte, el comprador que apuesta por el bajo se revela como “un perfil de presupuesto económico limitado que, bien adquiere su primera vivienda, bien actúa de inversor a pequeña escala”, concluye.
En el capítulo de precios, Madrid tiene los áticos más caros, con una media de 488.519 euros. También fue así en 2015, cuando arrojó un precio medio de 557.590 euros. Asimismo, es en esta región donde están las últimas plantas más grandes de España: 138 m² de media. El año pasado también fue la región con los áticos más grandes, registrando 144 m². Los más pequeños se ubican en Cantabria y Asturias (84 m²). En 2015, la autonomía líder fue Cantabria (78 m²). Por otro lado, Castilla-La Mancha repite como la región donde es posible comprar los áticos más asequibles del país, por un precio medio de 143.642 euros. El precio recogido hace un año fue de 145.390 euros. La autonomía en la que los áticos se han encarecido más es Baleares (16,75%), mientras que donde más han caído es en Extremadura (-14,51%).
Los que quieran vivir a la altura de la calle en Murcia serán los que menos se gasten, pues pagarán 95.087 euros de media. En 2015, los bajos más baratos fueron los de Extremadura (101.397 euros). Las plantas bajas más caras están el País Vasco, donde el coste se sitúa en los 254.432 euros. Esta región también fue la que ofertó las plantas bajas más costosas el año pasado: 265.330 euros de media. En cuanto a los bajos más grandes, La Rioja (118 m²) encabeza el listado, mientras que Extremadura (128 m²) fue la que contaba con los de mayor superficie hace un año. Los más pequeños están este año en Asturias (75 m²), que arrebata el liderazgo a Galicia (79 m²). La región donde más han subido de precio los bajos es Galicia (13,32%). La bajada más intensa la arroja Castilla-La Mancha (-13,32%).
Madrid vuelve a ser la región en la que mayor brecha de precio existe entre estas dos categorías de inmuebles. Mientras que el precio de los áticos está un 141% por encima que los bajos -un 192% en 2015-, estos últimos son un 58% más económicos que las plantas superiores de los edificios en altura -un 66% en 2015-. La autonomía donde hay un mayor equilibrio de precios es Galicia. Así, los bajos cuestan un 8% menos que los áticos, y estos solo un 9% más que los pisos de la planta inferior. El año pasado, las marcas más moderadas las arrojó Cantabria, donde las plantas bajas eran un 13% más asequibles que las altas y estas, a su vez, resultaban un 16% más caras que las primeras.
La mayor proporción de áticos vuelve a situarse en Baleares. En las islas esta tipología supone el 8% sobre el total de las viviendas anunciadas, un punto más que el año pasado. El País Vaso es la región donde menos últimas plantas existen: tan solo un 3% con respecto a la oferta del portal en esta autonomía. En 2015, esta autonomía empataba con La Rioja y Asturias con el 2%. Respecto a los bajos, Castilla-La Mancha es la que mayor volumen aglutina, igual que el año pasado. Si en 2015 registraba el 13% sobre el total, este año sube hasta el 17%. La oferta de esta clase de inmuebles es menor en La Rioja, con un 3% sobre la muestra total. Este puesto lo cubrieron el año pasado Galicia y Navarra, también con el 3% de sus correspondientes muestras.