Estamos a las puertas de Semana Santa, fecha en la que muchas familias dejan la ciudad para pasar las vacaciones en una segunda residencia. Sin embargo, los que se plantean adquirir una segunda vivienda se encuentran con un problema: encontrar financiación para una casa de vacaciones es más complicado que conseguir una hipoteca normal. Por ello, el comparador HelpMyCash.com nos da consejos para poder firmar una hipoteca de segunda vivienda, además de repasar todas sus características.
Características de las hipotecas de segunda vivienda
Por lo general, no se aplican las mismas condiciones en las hipotecas de primera vivienda que en las de segunda residencia. Estas últimas son productos con más riesgo para la banca, ya que cualquier familia dejaría de pagar antes su casa de vacaciones que su propio hogar. Las características que las definen a ambas difieren en algunos aspectos:
- Menor financiación: con una hipoteca normal se puede lograr hasta el 80 % de la financiación (hasta el 100 % con hipotecas para pisos de bancos). En cambio, si hablamos de segunda vivienda, nos prestarán entre el 60 y el 70 % del valor de la casa.
- Plazo más corto: para una hipoteca de segunda vivienda nos concederán, en general, entre 20 y 25 años para devolver la hipoteca, mientras que para una normal dispondremos de 30 o incluso 40 años.
- Intereses más altos: como los bancos corren más riesgo con esta clase de hipotecas, se puede dar que nos apliquen un interés más alto.
Sin embargo, el comparador puntualiza que algunos bancos ya aplican las mismas condiciones para hipotecas de primera y segunda residencia. A pesar de esto, para acceder a mejores condiciones se suelen requerir perfiles económicos muy altos.
Requisitos para conseguir una hipoteca de segunda residencia
Las exigencias para acceder a las hipotecas se han relajado: no se necesitan tantos ahorros ni ingresos tan elevados como hace unos años. Sin embargo, siguen existiendo unos mínimos que cumplir. Además, cuando hablamos de hipotecas de segunda residencia, estos requisitos suelen ser más estrictos:
- Disponer de ahorros, de entre un 30 % y un 40 % para pagar la parte que el banco no financia, más un 15 % para asumir los gastos de gestión e impuestos.
- Ingresos más altos, de más de 2.000 euros al mes. Por descontado, un requisito imprescindible es contar con un trabajo estable. En general, se trata de demostrar una alta solvencia económica.
- Para solicitar cualquier crédito al banco, un requisito imprescindible es no figurar en ninguna lista de morosos y no haber fallado ninguna cuota de otra hipoteca o préstamo personal.
- En muchas ocasiones, el banco requiere de una persona que avale la hipoteca. Tener avalista siempre será un punto a nuestro favor, ya que los bancos confiarán más en nosotros.
2 formas de conseguir financiación para una segunda vivienda
Ya hemos visto que los requisitos para financiar una segunda vivienda pueden ser más estrictos. Por ello, desde el comparador se proponen dos formas de acceder a este tipo de hipotecas:
- Solicitar directamente una hipoteca de segunda vivienda, asumiendo condiciones más estrictas.
- Rehipotecar la residencia habitual y con el capital prestado, pagar la segunda vivienda. Debemos tener en cuenta que con esta opción, en caso de impago corremos el riesgo de perder nuestro hogar.