El precio de las casas para singles es similar al que deben afrontar las parejas: 709 euros frente a 844 euros de alquiler y 160.962 frente a 199.089 euros de venta
La distancia entre la proporción de hogares unipersonales y para parejas continúa creciendo, y es que la tendencia de vivir en solitario es cada vez más popular. Según la Encuesta Continua de Hogares realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el número de personas que viven solas ha aumentado hasta alcanzar los 4.584.200 millones de hogares, representando un 25% del total. En contraposición, las viviendas formadas por parejas sin hijos han descendido levemente, hasta los 3,87 millones.
Se ha estudiado la oferta inmobiliaria disponible en las cinco ciudades españolas más pobladas según el INE: Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y Zaragoza. Según el estudio, a pesar de que la demanda de inmuebles unipersonales está creciendo, la oferta mayoritaria se corresponde con viviendas para dos personas, que disponen de mejores condiciones económicas que los singles para afrontar la compra.
Mientras que el precio medio de venta de un hogar unipersonal, con una única habitación, ronda los 160.962 euros (un 4% más que 2015), una pareja apenas tendrá que invertir un 24% más, es decir, alrededor de 199.089 euros, para acceder a una vivienda con mejores prestaciones. Esto implicaría gastar un 10% más que el año anterior. En el caso del alquiler, sucede lo mismo, ya que el precio medio para un single ronda los 709 euros, mientras que para una pareja alcanza los 844, tan solo un 19% más. En 2015, el precio de los inmuebles en alquiler para solteros era prácticamente el mismo, 713 euros frente a los 845 que costaba a las parejas.
Para Miguel Ángel Alemany, director general de pisos.com, “no hay duda de que los hogares unipersonales tienen más dificultades para acceder a una hipoteca que las parejas”. El experto señala que “las entidades siempre estarán más abiertas a negociar ante la aportación de ingresos de dos personas, minimizando el riesgo de impago del crédito”. En este sentido, destaca el contexto de precios de vivienda actual, que “no se corresponde con los salarios y que dificulta el acceso a la compra, sobre todo, en territorios de gran demanda”.
Atendiendo a la distribución de la oferta inmobiliaria en el caso de las viviendas unipersonales, la mayor parte sigue concentrándose en Madrid (41%), al igual que en 2015, cuando aglutinaba el 49%. En este sentido, la capital ha perdido peso en favor de Barcelona, que acumulaba el 17% el año pasado y en 2016 ha subido hasta el 21%. Le siguen Valencia (16%), Sevilla (13%) y Zaragoza (8%), que en 2015 reunían el 17%, 12% y 5%, respectivamente.
Por otra parte, en el caso de la oferta de viviendas para parejas, Madrid también es la que concentra mayor cantidad de inmuebles (35%), acusando un descenso de cinco puntos respecto a 2015 en favor de Valencia, que crece un punto y ocupa el segundo lugar (26%). Le siguen Barcelona (16%), Sevilla (12%) y Zaragoza (10%), que también crecen un punto cada una.
En cuanto a los distritos, el mayor número de viviendas destinadas a singles se localizan en Ciutat Vella, en Barcelona; en el centro de Madrid, y en el casco Antiguo de Sevilla. Por el contrario, la menor oferta de viviendas unipersonales se emplaza en el barrio de Vicálvaro, en Madrid, así como en Casablanc-Montecanal-Valdesparteras y Santa Isabel, ambos situados en Zaragoza.
Por su parte, los barrios que concentran una mayor oferta de inmuebles para parejas son L’Eixample y Ciutat Vella, en Barcelona, y el barrio de Salamanca, en Madrid. Los distritos que congregan la menor oferta de este tipo de inmuebles son Miralbueno, en Zaragoza; Pobles del Nord, en Valencia, y Santa Isabel, en Zaragoza.