La venta de viviendas de segunda mano está convirtiéndose en el motor de la recuperación del sector residencial. En este sentido, durante el segundo trimestre de 2017, se realizaron más de 119 000 compraventas de inmuebles. De esta cifra 99.343 eran inmuebles usados. Esta cifra representa el porcentaje más alto desde 2007 justo antes de que empezara la explosión de la burbuja inmobiliaria.
Por el contrario la venta de inmuebles nuevos, sigue con un comportamiento muy discreto,con ventas anuales que superan levemente las 20.000 operaciones, muy lejos de los 110.000 inmuebles nuevos que se vendían en la época de expansión inmobiliaria. Según varios expertos ésta evolución tan discreta de la venta de inmuebles nuevos, es debida en gran medida a que en estos momentos se dan muy pocos permisos para construir obra nueva.Esta realidad provocará que en un próximo futuro esta tendencia contribuirá a que se produzca un incremento importante de precios de la obra nueva. No olvidemos que aun existiendo en la actualidad, stock de obra nueva, éste está ubicado en zonas con muy poca demanda , mientras que en las zonas más demandadas sigue faltando obra nueva.