Los hogares españoles destinan el 24% de su presupuesto familiar anual al pago de la cuota hipotecaria o a la renta de alquiler, tal y como se desprende de la última Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF) del Instituto Nacional de Estadística (INE). Según el mismo, vivir de alquiler deja a las familias una menor cantidad de dinero para cubrir otros gastos, como alimentación u ocio, ya que el arrendamiento requiere el 26,18% del presupuesto frente al 21,69% necesario para hacer frente al pago de una hipoteca media.
Por encima de la media española se encuentran nueve comunidades autónomas: País Vasco (34,30%), Madrid (30,71%), Baleares (29,04%), Andalucía (25,01%), Cataluña (24,74%), Comunidad Valenciana (24,26%), Cantabria (24,23%), Asturias (24%) y Canarias (23,94%). Por debajo, están las otras ocho: La Rioja (23,46%), Galicia (22,85%), Castilla y León (21,70%), Murcia (20,24%), Aragón (20,13%), Extremadura (20,09%), Navarra (19,37%) y Castilla-La Mancha (18,37%).
El alquiler resulta más caro en un primer momento porque, aunque no se reconozca, en la mensualidad se suelen imputar gastos como la comunidad, el mantenimiento, e incluso, determinados impuestos. No hay que olvidar que el alquiler lleva innata una expectativa de rentabilidad. Cuando se trata de una vivienda en propiedad, la cuota hipotecaria no contempla estos gastos, que siempre se pagan aparte. Si se sumaran, es posible que la cifra fuera muy similar a la del alquiler.
El alquiler supone un mayor gasto para las familias
Vivir de alquiler deja a las familias españolas menos dinero disponible para otros gastos, ya que requiere el 26,18% del presupuesto. Si cada hogar dispone, de media, de 27.038 euros anuales, un alquiler obliga a los inquilinos a desembolsar 7.077 euros al año, un total de 590 al mes, para pagar la cuota.
Sin embargo, los propietarios solo tienen que destinar 5.865 (489 €/mes) al pago de su hipoteca, lo que les permite ahorrar 101 euros mensuales y 1.212 euros anuales.
El porcentaje destinado a vivienda varía mucho según la región. En lo que respecta al alquiler, los inquilinos que más se gastan son los de Madrid (36,87%), País Vasco (33,95%), Baleares (30,94%), Comunidad Valenciana (28,42%) y Andalucía (26,77%). En el lado opuesto se sitúa Extremadura, donde el 20,92% del presupuesto familiar es suficiente para hacer frente a la renta de alquiler, seguida de Navarra (21,14%), Castilla-La Mancha (21,21%), Galicia (22,12%) y Aragón (22,17%).
Los propietarios, por su parte, lo tienen especialmente complicado en el País Vasco (34,66%), Baleares (27,14%), Cantabria (25,36%), Asturias (24,92%) y Madrid (24,56%), mientras que los de Castilla-La Mancha (15,53%), Navarra (17,60%), Aragón (18,09%), Murcia (18,31%) y Extremadura (19,27%) son los que menos presupuesto destinan al pago de la cuota hipotecaria.