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Aunque las reuniones de vecinos para aprobar presupuestos o ver el resumen anual de cuentas se siguen celebrando, cada vez es más difícil encontrarse con una convocatoria en un cartel en el portal. Los nuevos vecinos son nativos digitales y necesitan nuevas herramientas que les permitan mantenerse al día de lo que pasa en su comunidad, según IESA, empresa proveedora de soluciones tecnológicas con más de treinta años especializados en el sector de la administración de fincas.
“Aplicaciones móviles, grupos de whatsapp o webs informativas son los nuevos canales que los ciudadanos 3.0 están reclamando y que los administradores de fincas tienen que proporcionarles para hacer de la comunidad de vecinos un entorno participativo”, explica Enrique Sánchez, director general de IESA.
A la percepción de que estas reuniones suelen ser largas y tediosas, suele unirse la falta de tiempo de los propietarios tanto para leer la información sobre los temas a tratar en la junta como para acudir a votar. La clave está en aportar nuevas modalidades de asistencia. “España es uno de los países del mundo con mayor índice de uso de la telefonía móvil. Por tanto, hablar de eficiencia y tecnología pasa por usar todos los canales de comunicación disponibles que nos ofrece la tecnología”, comenta el director general de IESA.
De este modo, en un futuro muy cercano podremos ver las reuniones de vecinos por streaming o votar a través de nuestros móviles. Si la información es poder, uno de los desafíos de los administradores 3.0 es hacérsela llegar a los habitantes de la comunidad adaptándola al formato en que les será de mayor utilidad.
Los vecinos más tecnológicos ya no quieren listas de papel interminables con el estado de las cuentas, las derramas o la situación de pago de los morosos. Igual que se ha revolucionado el modo de recibir los datos, también ha cambiado el lenguaje. “Los administradores tienen que ser capaces de manejar abreviaturas, lenguajes de emoticonos y fonemas y presentar la información muy resumida y visual. Mejor gráficos que palabras”, resume Sánchez.
Pero la comunidad no acaba en las juntas y el reto de los administradores de fincas es adecuar la tecnología al día a día de las comunidades de propietarios y facilitar la vida de sus residentes. De este modo, poder reservar espacios comunes por Internet, dar parte de una incidencia mediante una app o cambiar los datos de contacto online por el propio usuario, son otras de las herramientas que los gestores de las fincas ya están poniendo a disposición de los vecinos.
“Los nativos digitales ven el mundo de una forma distinta, la comunidad física se está trasladando por comunidad virtual y la economía por colaboración. Necesitan nuevos instrumentos que se adapten a ellos y los administradores de fincas deben ser sus aliados para su vida en la comunidad”, concluye Sánchez.
