El mercado inmobiliario de España se encuentra al rojo vivo, según un informe de PWC, que añade que hay grandes volúmenes de capital esperando a entrar en el mercado. Madrid y Barcelona son las ciudades más «deseadas» para invertir. De hecho, la capital sube este año hasta el puesto tres del ranking de oportunidades de inversión de Europa. Los activos más buscados para 2015 serán los edificios públicos, los inmuebles ubicados en zonas secundarias y las viviendas, con el fin de destinarlas al alquiler.
Para este año España seguirá estando en el punto de mira de los inversores, sobre todo Madrid y Barcelona, que se colocan en la tercera y décimo tercera posición del ranking de oportunidades de inversión, pese a las incertidumbres económicas y geopolíticas. La confianza de los inversores sigue siendo elevada y las expectativas de rentabilidad y de creación de empleo en el sector se mantienen altas, según el informe tendencias del mercado inmobiliario en Europa 2015, elaborado por PWC y el Urban Land Institute, a partir de 500 entrevistas con los principales actores del sector.
El capital internacional se ha dirigido en masa hacia España, impulsado fundamentalmente por los fondos de private equity. Los precios de activos como oficinas o locales comerciales han subido en Madrid, lo cual sugiere que los inversores que buscan retornos más elevados probablemente pongan sus miras en mercados secundarios de España durante el año que viene para obtener mayores rentabilidades.
Pero también buscarán invertir en los edificios del estado y en viviendas, con el fin de ponerlas en alquiler. Del informe se desprende que “existe la posibilidad de desarrollar el sector del alquiler y al mismo tiempo están saliendo al mercado paquetes de viviendas que no se veían desde hace siete años. Por eso es buen momento de invertir en residencial”
Uno de los responsables globales de banca de inversión más cautos con respecto al mercado inmobiliario comercial de España, se muestra relativamente optimista con respecto a las perspectivas del segmento residencial. “Es posible mejorar los activos, conseguir inquilinos dispuestos a alquilar y que las valoraciones aumenten como resultado de ello. Posteriormente, quizá tengas que privatizar y vender las unidades a sus ocupantes o mantenerlas como alquileres a largo plazo”, señala
Pero no todo el mundo se muestra convencido de que España esté preparada para la inversión. “Hemos visto muchos flujos de capitales entrantes en Madrid y Barcelona, pero los alquileres aún no se han recuperado”. Los alquileres prime de Madrid y Barcelona siguen un 30% por debajo de los máximos alcanzados antes de la crisis. Sin embargo, los inversores se muestran optimistas e indican que el crecimiento se recuperará en Madrid durante 2015, al menos en lo referente a los activos mejor ubicados y a las oficinas con valor añadido.