A las puertas del otoño, los árboles empiezan a cambiar de color al objeto de prepararse para la nueva estación. Nuestro gobierno desde el día después de las últimas elecciones generales, también intenta cambiar para adecuarse a la nueva situación económica, pero en muchas ocasiones con posturas encontradas en su propio ámbito de influencia.
Un ejemplo. La postura del gobierno y su partido, frente a la primera gran crisis de una empresa importante, Martinsa , mientras José Blanco, ha finales de julio último, se manifestó favorable a ayudar a los afectados y al sector, Solbes dibujaba una línea claramente posicionada en la no intervención del gobierno.
Estas contradicciones pueden provocar que nos sea difícil superar el próximo invierno inmobiliario. Si queremos llegar a la próxima primavera con suficientes fuerzas para no morir o empezar a crecer de nuevo, es necesario que esas dos líneas se encuentren en un punto intermedio. Las hojas caen para renovarse y nacer luego con más vigor .En el mercado también existen las estaciones y por ello, si no hacemos barbaridades, podemos ser optimistas.
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