El mercado inmobiliario en la ciudad de Madrid sigue su tendencia al alza en cuanto a precios y cantidad de operaciones, especialmente en el sector de locales comerciales y de la compra y alquiler de edificios enteros. En este sentido, el interés por este tipo de bienes inmuebles ha aumentado exponencialmente en los últimos cinco años, registrando en este momento un aumento medio del precio por metro cuadrado de un 5% interanual respecto a mediados de 2017.
En la ciudad de Madrid existen alrededor de 5.000 locales en alquiler, de los cuales el 50% tienen una renta por encima de los 1.500 euros/mes (1.430 euros/mes a mediados de 2017). Los más caros, alrededor de 900 locales, superan una renta mensual de 5.000 euros y representan un 20% del total. También existen 5.500 locales en venta, casi la mitad de los cuales tienen un precio de transacción de más de 300.000 euros (285.000 euros a mediados de 2017).
Los ejes comerciales de Gran Vía-Preciados, Castellana y Goya-Serrano son los más buscados por las grandes marcas, mientras que en las zonas con menos demanda abundan los locales de menor precio y superficie con mayor interés de las marcas locales. De hecho, la mitad de los locales en alquiler de Madrid tienen una superficie de menos de 100 metros cuadrados. Además, uno de cada cinco locales de la ciudad de Madrid se halla cerrado en estos momentos, lo que repercute directamente en la rentabilidad media del sector de locales.
Por su parte, el mercado de edificios de la capital se compone de alrededor de 70 edificios disponibles para alquiler y de otros 150 edificios a la venta. El precio medio por edificio es de 40.000 euros mensuales para su alquiler (38.000 euros a mediados de 2017) y de 3,5 millones de euros para su compra (3,2 millones de euros a mediados de 2017). Los distritos con más demanda tanto en el sector edificios como en el de locales son Centro, Chamartín, Chamberí y Salamanca.
Juan Ramón Rol, director de las oficinas de Laborde Marcet en Madrid, indica que “el mercado madrileño es una referencia dentro del sector inmobiliario español y en el convergen las señas de identidad del mismo, en cuanto aglutinador de la oferta y la demanda tanto de operadores como de propietarios e inversores ávidos de aprovechar su versatilidad y crecimiento”.
El crecimiento del mercado inmobiliario madrileño ha provocado la expansión de Laborde Marcet en la capital, donde hace tres meses amplió su presencia con nuevas incorporaciones en su equipo y estrenó sus nuevas oficinas situadas en la Glorieta de Quevedo 8, en el cotizado distrito de Chamberí.