El mercado inmobiliario se ha reinventado en los últimos años gracias a la tecnología y transformación digital de sus procesos. El sector proptech, fruto de los términos anglosajones property y technology, ha crecido exponencialmente hasta superar las 230 compañías en España y emplear en la actualidad a más de 5.000 personas. La compañía ProntoPiso, la proptech especializada en property-chain que garantiza la venta de las viviendas a precio de mercado en menos de 90 días, ha seleccionado cinco tendencias tecnológicas que están dando una vuelta de tuerca al sector.
Big Data. Los datos son una fuente de información de un valor incalculable. Aplicados al sector inmobiliario, permiten que los individuos y las compañías tomen decisiones informadas con respecto a invertir, administrar y operar en base a ese análisis de macro datos. El big data se puede utilizar en las proptech para proporcionar información relativa a la historia de la propiedad, el coste de la misma, los detalles del barrio, el cálculo del pago de la hipoteca e incluso para pronosticar su revaloración futura teniendo en cuenta diferentes parámetros.
Blockchain. Las aplicaciones del blockchain a la industria inmobiliaria son muy diversas. Algunas compañías lo implementan para tramitar los pagos del alquiler, eliminando intermediarios y reduciendo costes en la transacción. Otro ejemplo de aplicación de esta tecnología es el que utiliza ProntoPiso, que ofrece la tecnología blockchain de JLL para la tasación de las viviendas. Gracias a ello se puede validar la información ante terceros, para que cualquier usuario pueda utilizarla en los distintos procesos que requieran de un documento oficial, como la solicitud de una hipoteca, con el consiguiente ahorro de tiempo y costes.
Realidad virtual (RV) y realidad aumentada (AR). Las aplicaciones de RV y AR se ponen al servicio de un potencial comprador que ahora puede ver completamente una propiedad incluso cuando todavía no se ha construido. La realidad virtual es un recurso que permite a los compradores adentrarse de lleno en el inmueble y facilitar la toma de decisiones. Hay compañías especializadas en ofrecer vídeos 360 grados que permiten conocer previamente cómo será la vivienda, y se convierten en una herramienta útil para aumentar el número de operaciones cerradas.
Chatbot. Hoy en día el 70% de los consumidores consulta sus dudas a través del dispositivo móvil. El desarrollo de chatbots se ha adaptado a los hábitos de consumo, siendo WhataApp un nuevo canal en el que comunicarse con las compañías. “Aplicado al sector inmobiliario, el desarrollo de algoritmos y la herramienta de chatbot ha permitido al usuario obtener la valoración de su vivienda en dos minutos y a través del móvil, un proceso que de forma analógica podía demorarse varias semanas”, señala Jesús Pérez Picó, CMO de ProntoPiso, compañía que ha lanzado un servicio de chatbot para valorar viviendas de forma online.
Drones. Los drones son capaces de alcanzar las plantas superiores de grandes edificios y tomar imágenes áreas de cualquier superficie, desde propiedades en la costa que hacen soñar a los futuros inquilinos, hasta imágenes de una vivienda unifamiliar y el barrio en el que se encuentra. Las opciones son infinitas y todas ellas han ayudado a los agentes inmobiliarios a mejorar su trabajo y brindar a los futuros compradores una panorámica área e inspiradora del terreno y el inmueble que van a comprar.
Tecnología al servicio del sector inmobiliario
El sector inmobiliario ha mantenido una línea de desarrollo tradicional en las últimas cuatro décadas, sin embargo, la revolución de la tecnología ha cambiado el paradigma en el Real Estate en los últimos 5 años gracias a la incorporación de procesos automatizados, la explotación de grandes cantidades de datos y la implementación de nuevas tecnologías punteras.
“El mercado inmobiliario se apoya en la tecnología para ofrecer al cliente una experiencia de compra totalmente digital y personalizada. Gracias a los avances en la valoración de viviendas online de forma instantánea mediante algoritmos y el análisis de macro datos, el propietario puede conocer cuánto vale su inmueble en cualquier momento y desde cualquier lugar”, apunta Pérez Picó. “La optimización de los procesos, la reducción de costes operaciones y las experiencias de compra con el cliente mejoran gracias al uso de la tecnología aplicada al sector inmobiliario”, concluye.