La precrisis que arrastra desde 2013 en el sector inmobiliario ha hecho que muchas inmobiliarios se tengan que adaptar a la situación
Según datos del INE, el sector inmobiliario en España ha alcanzado un total de total de aproximadamente 35.000 empresas inmobiliarias en el territorio nacional con 1 año o menos de vida. Desde 2014, implica un crecimiento del 70%.
Para la supervivencia de las mismas, son muchas las que han se han adaptado a los cambios del entorno a través de un desarrollo de las nuevas tecnologías. El servicio que ofrecen implica una gestión de compra en la que son tres los protagonistas: la inmobiliaria, el cliente y la entidad bancaria. La inmobiliaria funciona como mediadora entre el cliente y el banco para ofrecer al cliente la hipoteca que mejor se adapte a las características del que solicite el cliente, permitiendo que les ayuden y resuelven las dudas que posean, tanto de aspectos jurídicos como económicos.
No obstante, también hay quienes prefieren buscar libremente sin necesidad de mediadores. Este método más «tradicional» se basa en muchos casos en empresas, como la de iAhorro, que comparan las múltiples ofertas de todas las entidades de forma independiente y gratuita. Esto facilita la reducción del tiempo de búsqueda, mientras que suelen ser tres meses se puede llegar a reducir a un mes.