La cuota mensual de la hipoteca es una de las principales cargas financieras que soportan las familias de nuestro país. Conocer los mecanismos que existen para reducirla mes a mes puede igualmente tener un impacto muy positivo en nuestra economía doméstica. El comparador de hipotecas HelpMyCash nos detalla las claves para domar el precio de los préstamos hipotecarios.
¿Cómo puedo reducir la cuota de mi hipoteca?
Cuando firmamos una hipoteca, incluso si es a tipo fijo (cuyo interés no varía a lo largo de la vida del préstamo), tenemos que tener claro que hay maneras de rebajar el precio que vamos a pagar en cada cuota.
Para ello podemos contar con las siguientes técnicas:
- Amortizar capital: la cuota hipotecaria se compone de intereses más capital. Estos intereses se calculan respecto al capital pendiente, por lo que si realizamos una amortización de capital, pagaremos menos intereses. Habrá que estar atentos a lo que ponga en nuestro contrato, ya que esto puede conllevar comisiones.
- Alargar el plazo: no es lo mismo devolver 100.000 euros en 10 años que en 30, por lo que estirar el plazo de nuestra hipoteca, puede servirnos para pagar menos cada mes, aunque encarezca el préstamo en términos globales. Nos serviría para aliviar nuestra economía si atravesamos momentos complicados.
- Subrogación de hipoteca: buscar un banco que nos haga una oferta mejor y cambiar nuestra hipoteca a dicha entidad es otra manera de reducir el coste mensual. Habrá que tener en cuenta que este proceso tiene unos costes, con lo que habrá que ponderar si nos sale a cuenta o no.
- Contrato privado: de forma paralela a nuestro contrato hipotecario, podemos realizar un nuevo acuerdo contractual en nuestra sucursal en la que se establezcan unos cambios determinados, como un aumento o disminución de la vinculación, un cambio en el tipo de interés o la modificación o supresión de alguna cláusula. Es una táctica muy eficaz ya que no debería conllevar coste alguno.
Ahorro en la vinculación
Existe otro tipo de coste asociado a la hipoteca, pero que no se suele contabilizar dentro de la mensualidad, que es el coste de los productos asociados en concepto de vinculación.
La vinculación bancaria es la manera mediante la cual los bancos pueden ofrecer tipos de interés más bajos, a cambio de que nosotros contratemos más productos de todo su repositorio de ofertas. El problema es que esta vinculación puede en ocasiones superar el coste que supondría tener un tipo de interés más alto, por lo que merece la pena realizar nuestros cálculos y sacar conclusiones.
Como último punto, cabe destacar la cantidad de reclamaciones que se reciben respecto al cobro de comisiones de mantenimiento en la cuenta en la que se domicilia el cobro de la hipoteca. Frente a esta situación, el Banco de España estipula dos situaciones:
- En las hipotecas firmadas antes de 2012 la cuenta asociada debe ser gratuita, en tanto que sea usada exclusivamente para pagar la mensualidad.
- Para los préstamos firmados después de 2012, sólo se podrán cobrar comisiones si se cumplen los siguientes requisitos:
- Que en la oferta vinculante que recibimos antes de la firma del contrato hipotecario figure que la cuenta asociada tiene un coste
- Que se informe al cliente de la parte del coste total que corresponde al mantenimiento de dicha cuenta
- Que tanto su contratación, como su coste figuren en el contrato de la hipoteca
- Que dicho coste no sea modificado unilateralmente por la entidad