Una de las fincas cinegéticas con más trofeos de la provincia
La finca cinegética Carboneras del Valle, enclavada en la pequeña localidad cordobesa de Alcaracejos, cuenta con 2.180 hectáreas, 6 cortijos y un edificio principal de 18 habitaciones.
Un proyecto turístico a nivel internacional, vinculado a la caza mayor, la ganadería y el mundo rural.
En la actualidad, cada vez son más las demandas tanto de particulares como de empresas vinculadas al turismo rural que valoran principalmente la particularidad de la propiedad, como condición imprescindible para sus nuevas adquisiciones.
La finca Carboneras del Valle, una de las fincas cinegéticas con más trofeos de la provincia, se convierte en una opción más que interesante para aquellos que quieren hacerse con este tipo de propiedad, puesta a la venta por la consultora Lançois Doval y que está valorado en 17 millones de €.
Según explica Robert Menetray, fundador de la consultora Lançois Doval, “el inversor se encuentra con una de las fincas cinegéticas que mejores resultados ha obtenido en los últimos tiempos. En 2016, se abatieron más de 200 piezas de caza mayor en tan solo dos monterías, obteniendo casi 100 trofeos, en su mayoría de oro. A esta riqueza conviene sumar las posibilidades turísticas e instalaciones disponibles, entre las que sobresale una vivienda principal que cuenta con la nada desdeñable cifra de 18 habitaciones. La caza se articula en torno a seis cortijos que gozan de un buen mantenimiento”.
Cotos de caza y monterías en Córdoba, una experiencia exclusiva
Enclavada en la pequeña localidad cordobesa de Alcaracejos, esta finca de caza mayor se extiende a lo largo de más de 2.000 hectáreas y reúne todos los requisitos necesarios para la organización de este tipo de eventos, entre otros. Se trata de uno de los tipos de caza más antiguos que se practican en todo el mundo, con especial predicamento y recorrido histórico en la Península Ibérica. La riqueza faunística del territorio español en general y del interior andaluz en particular ha propiciado la práctica de esta actividad tanto con fines económicos como recreativos.
Y es que gracias a las características de la provincia de Córdoba, los aficionados a la caza mayor pueden abatir numerosas piezas entre las que destacan los jabalíes y los ciervos. En menor proporción, corzos y gamos son otras especies que se dejan ver con cierta frecuencia en las sierras cordobesas. La ‘oferta’ se completaría con una nutrida presencia de aves y otros animales que formarían parte de la caza menor, como la perdiz roja o la tórtola además de pequeños mamíferos como liebres o conejos. Esto da pie a combinar distintos tipos de caza dentro de una misma montería.
Las estadísticas, desde luego, muestran una fotografía muy positiva en lo que se refiere al grado de afición a la caza en la región. Tomando únicamente en consideración los datos referentes a Córdoba, nos encontramos con algo más de 40.000 licencias concedidas durante el ejercicio 2015/2016. En dicho periodo se autorizaron, además, cerca de cuarenta monterías por toda la provincia. Un atractivo particular de esta finca en venta es que apenas el 15% de los cotos de Córdoba participan de la caza mayor (unos 250 sobre más de 1.400 cotos en total), que es lo que se requiere para organizar monterías de calidad.