Por Redacción.
En este artículo presentamos una nueva idea sobre espacios para publicidad que puede afectar o ser de interés para muchos profesionales vinculados al sector inmobiliario
1. Introducción
Durante el descanso matinal de unas jornadas sobre publicidad, un veterano publicista comentaba detrás de una humeante taza de café, que no podía dejar de sorprenderle el nivel de facturación que generaba la publicidad. Es cierto, el crecimiento ha sido espectacular. Ello ha sido debido a la acción de diversos agentes y circunstancias, pero entre éstas y aquéllos, hay que destacar la de las personas que han sabido encontrar nuevos espacios para la publicidad. Hace años, nadie se hubiera atrevido a pensar que se llegaría a colocar publicidad en las papeleras, en los neumáticos, en los suelos, etc. Y se ha colocado publicidad en todos estos extraños espacios y en otros muchos. Y si se ha colocado es porque había una expectativa de que fuera rentable que se ha cumplido en la mayoría de casos. Ahora y aquí presentamos una nueva idea sobre espacios para publicidad que puede afectar o ser de interés para muchos profesionales vinculados al sector inmobiliario.
2. Planteamiento
La idea es sencilla: Reservar un espacio en las porterías de los inmuebles para la publicidad.
Las posibilidades de éxito de esta idea en el momento de ser desarrollada y puesta en práctica, depende de que seamos capaces de darnos cuenta y potenciar los siguientes factores pensando previamente que, el espacio es importante, pero no lo más importante.
Hemos de ser conscientes que por razón de nuestra profesión (administrador de fincas, profesionales de la inter mediación inmobiliaria, asesores técnicos de patrimonios inmobiliarios, etc.) tenemos un conocimiento privilegiado de las necesidades y de las características económicas y culturales de las personas que viven en un edificio y además facilidad de acceso a estas personas y sus representantes.
Por razón de este conocimiento privilegiado y facilidad de acceso a estos grupos de personas, que podemos clasificar desde un punto de vista comercial, analizando su capacidad de consumo, tanto a nivel cuantitativo como cualitativo, estamos en condiciones de ofertar espacios para publicidad desde una posición privilegiada.
Pensemos. Cualquier publicista desea tener un soporte para su publicidad. En nuestro caso un soporte físico. Lo tenemos. Además el publicista busca que el soporte si es físico, como es nuestro caso, esté en un lugar que el receptor buscado del mensaje publicitario tenga posibilidades de ver, o más aún, que lo vea forzosamente. Veamos un ejemplo. Una valla publicitaria de neumáticos en una gasolinera. Sin duda si la valla está bien colocada todos los conductores recibirán el mensaje de publicidad de neumáticos, y el conductor de vehículos es un cliente potencial de neumáticos. Ese mismo anuncio de neumáticos colocado en la entrada de un cine, emitirá el mensaje a muchas personas que jamás comprarán unos neumáticos, ya que no todas las personas que van al cine tienen coche; contrariamente todas las personas que repostan gasolina tienen o son usuarios de vehículo, y en consecuencia potenciales compradores de neumáticos.
En nuestro caso, conocemos, como el publicista de neumáticos que instala el anuncio en la gasolinera, las características de los potencia les compradores. Si los inquilinos del edificio son personas mayoritariamente de la tercera edad, no ofertaremos publicidad para juguetes. No ofertaremos leña si los pisos no tienen chimenea, y en consecuencia sí lo haremos, ofertar juguetes y leña si los ocupantes son mayoritariamente jóvenes y los pisos tienen chimenea.
Esta información, por ejemplo, si los pisos tienen chimenea o no, la edad media de los vecinos, el nivel medio cultural, económico, etc. es de una trascendencia fundamental para ofertar productos con expectativas de éxito, es decir, con posibilidades de vender. Muchas empresas gastan fortunas en hacer estudios para conocer este tipo de información. Nosotros por nuestra relación profesional con el inmueble y sus propietarios y ocupantes la tenemos ya. Sólo se trata de saber ordenarla y explotarla en beneficio de todos y respetando la ley. Sin duda el receptor del mensaje publicitario, en nuestro caso, el propietario y/u ocupante del edificio se beneficia, ya que recibe información publicidad de un producto que potencialmente le puede interesar. El anunciante también se beneficia del sistema, pues se anuncia delante del público natural para cada concreto producto. El primer requisito a cumplir para ejecutar esta idea es saber explicar lo aquí dicho a los agentes que forzosamente deben intervenir en su proceso de ejecución.
3. ¿Cómo se debe presentar la idea?
En este apartado vamos a tratar de dar instrucciones precisas para ejecutar la idea que preside este artículo.
3.1 A la comunidad de propietarios
Los argumentos que debemos esginmir delante de los vecinos a la hora de presentar el proyecto son básicamente los siguientes.
No comporta ningún gasto para la comunidad, no comporta ninguna molestia. Los vecinos acceden si quieren a información que puede ser de su interés sobre productos o servicios acerca de los cuales en principio pueden tener interés, por razones de proximidad, nivel económico del vecindario, etc. Además se evitará la publicidad desordenada y abusiva.
Obviamente el anunciante es el primer interesado en presentar productos que pue dan ser atractivos a una comunidad concreta. No se anunciará un electricista que tenga su negocio en la otra punta de la ciudad, sí en cambio el cercano al edificio en cuya portería se publicita. Tampoco se anunciará un vendedor de toldos en una portería si el edificio no tiene terrazas. Por el contrario, si el edificio está en una zona ruidosa, un instalador de cristales aislantes tiene muchas posibilidades de que su anuncio surta efectos positivos y los vecinos se alegran de recibir información sobre un producto que puede solucionar un problema que les afecta.
3.2. El soporte de publicidad
Es aconsejable presentar un soporte que sea neutro, es decir, que no altere la decoración de la portería. De esta forma será más fácil convencer a los propietarios de la inclusión del soporte. Además se debe insistir que este soporte publicitario impedirá que se deposite publicidad anárquicamente en los buzones.
3.3. Al posible anunciante
Se debe destacar que su anuncio no se dirige a una generalidad de personas, si no a grupos de personas que por diferentes razones, es más probable que estén interesadas en su producto.
4. Sistema para poner en práctica la idea
Para la ejecución de esta idea será conveniente preparar la siguiente documentación:
4.1. Redacción de una nota explicativa del proyecto de instalación de soporte publicitario para porterías, al objeto de que el administrador de fincas correspondiente pueda presentarlo a la junta de propietarios del edificio para su aprobación. Veamos un posible modelo:
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