El próximo sorteo de Navidad está a la vuelta de la esquina y son muchos los que sueñan con ser propietarios de una vivienda si resultan agraciados. El portal inmobiliario www.pisos.com ha analizado las posibilidades que este premio ofrecería en el mercado inmobiliario actual, tanto en compra como en alquiler. A pesar de que los 400.000 euros del décimo premiado se quedarían en 320.500 euros después de descontar los impuestos, el ganador del Gordo podría adquirir dos viviendas de precio medio o vivir de alquiler durante 36 años.
Según el último informe de precios de venta elaborado por el portal inmobiliario pisos.com, la vivienda tipo de segunda mano en España, de 90 metros cuadrados de superficie, tiene un precio medio de 141.210 euros. Así, con un décimo premiado con el Gordo se tendría la opción de comprar hasta dos y, además, sobrarían 38.080 euros que podrían emplearse en reformas. A nivel regional, las diferencias son notables. En Castilla-La Mancha podrían comprarse hasta cuatro pisos, mientras que en Baleares, Madrid y País Vasco solo podría adquirirse un inmueble. Por otro lado, en Aragón, Extremadura y Murcia los afortunados tendrían la oportunidad de comprar tres viviendas, y en las 10 regiones restantes el premio costearía el precio de dos residencias.
Según Ferran Font, director de Estudios de pisos.com, “la vivienda es una excelente opción de inversión, y más si se cuenta con capital para comprar al contado, algo que el Gordo facilita”. Para el portavoz de pisos.com, “los premiados tienen la ocasión de invertir en el negocio inmobiliario residencial, un sector que cuenta con unas brillantes expectativas de revalorización”. Font revela que una vivienda reformada y bien ubicada es un activo que se alquilaría rápidamente, proporcionando unos rendimientos muy interesantes”.
Para aquellos que prefieran vivir en régimen de alquiler, ganar el Gordo les daría la posibilidad de hacerlo durante mucho tiempo, sin preocuparse de las mensualidades. Con una renta media en España de 740 euros al mes, el agraciado con el primer premio dispondría de una vivienda en arrendamiento por 36 años. También en esta opción de vivienda encontramos pronunciadas diferencias a nivel regional. En Extremadura, donde la renta media se sitúa en los 440 euros mensuales, se podría alargar el periodo de alquiler durante 61 años. En el otro extremo encontramos Madrid, con un precio medio de 1.245 euros mensuales, que permitiría a los inquilinos despreocuparse de las cuotas durante 21 años.
¿Y si ya tengo una hipoteca?
El importe medio de la hipoteca fijado por el Instituto Nacional de Estadística el pasado mes de septiembre en España ascendía a 123.649 euros4. Sin contar los gastos de cancelación que conllevaría poner fin a la deuda contraída con el banco, sobrarían 196.851 euros para comprar otra vivienda y 55.641 euros para reformarla. Font indica que, liquidando una hipoteca recién contratada, “el ahorro en intereses compensa sobradamente los gastos por cancelación, tanto la comisión por amortización total aplicada por la entidad bancaria como los gastos relativos al notario y al registro”.
Otro asunto es, según el experto, que la hipoteca lleve pagándose varios años. Según Font, “el sistema de amortización francés es el siguen de forma más habitual las hipotecas en España. Esto significa que los primeros años del préstamo las cuotas van destinadas casi en exclusiva al pago de los intereses, mientras que los últimos años lo que se liquida es el capital”. En este sentido, el portavoz de pisos.com manifiesta que “utilizar el dinero del Gordo no repercutiría en un ahorro de intereses si la hipoteca se firmó hace tiempo, por lo habría que hacer cálculos y ver si compensa”.
Además, Font indica que “si todavía nos estamos beneficiando de la devolución por compra, eliminada en 2013, quizá sea mejor hacer cada año la aportación máxima de 9.040 euros para que Hacienda nos devuelva 1.356 euros en la declaración de la Renta”. El experto añade que “en casos tan particulares, habrá que ver los años que quedan pendientes, dado que también hay que tener en cuenta otros aspectos, como si existe o no comisión por amortización parcial y a qué porcentaje asciende”.