La Gran Vía madrileña continúa con el goteo de compras y cambios de uso de los antiguos edificios en una de las principales calles de la capital. Axa Real Estate, la inmobiliaria del grupo asegurador, acaba de cerrar la operación de compra del edificio que alberga el hotel y los cines Rex por 42 millones de euros.
El apetito de los inversores en apostar por la Gran Vía de Madrid ha hecho que el precio de salida a la venta del edificio, que se encontraba 28 millones de euros, haya mejorado un 50%. Hasta ahora, el inmueble era propiedad de la firma equity Inmuebles S.L., cuyos accionistas son los herederos de Max Mazin, Antonio Briones y la familia Calero (dueña de la cadena hotelera Vincci) donde se ubicaba el hotel y los cines Rex.
La intención de Axa Real Estate es remodelar el inmueble, que alberga un hotel de tres estrellas 7.540 m2 de superficies distribuidas en 11 plantas y consta de 147 habitaciones para convertirlo en un hotel de lujo. Además, cuenta con los Cines Rex (659 m2) y otros dos locales comerciales.
La inmobiliaria Axa Real Estate ya compró los antiguos cines Avenida, en el número 37 de la Gran Vía, por 80 millones. Un lugar que ahora ocupa la firma de ropa H&M.
Alrededor de la Gran Vía comienza a concentrarse una oferta hotelera de lujo que pretende estar abierta entre 2018 y 2019. Por un lado, la compra del Edificio España por parte de Wanda Group, donde proyecta un hotel de cinco estrellas. Al lado, Barceló se instalará en la Torre de Madrid.
Avanzando por la artería de Madrid se se encuentra el Edificio Intercontinental, propiedad de la familia Sebrango y que actualmente está en obras para convertirse en un hotel de 160 plazas. Dentro del sector hotelero, destaca también la reconversión por Generali del edificio número 10 de Gran Vía donde se alojaba la Consejería de Educación y que será un hotel de cuatro estrellas de la cadena Vincci.
Cerca de la Gran Vía se encuentra el Complejo Canalejas, en plena construcción donde se instalará la cadena Four Seasons.