Los administradores de fincas manejan información de miles de vecinos y proveedores y un ciberataque puede ocasionarle graves pérdidas económicas. Un buen backup debe ser automático, completo, fiable y tiene que estar disponible en todo momento.
En las últimas décadas hemos vivido una auténtica revolución digital gracias a la popularización de Internet, la llegada de los smartphones y las tabletas y los administradores de fincas se han beneficiado de estos avances para ser más eficientes y llegar a más clientes. Pero, al mismo tiempo que evolucionaba la tecnología, también lo hacían las amenazas a la seguridad informática, el malware crecía y evolucionaba con el objetivo de enriquecer a los hackers.
“Hoy en día, un administrador de fincas gestiona los datos de miles de vecinos de sus comunidades y otros tantos de los proveedores con los que trabaja. Estos datos son muy sensibles y deben ser protegidos con un grado de seguridad muy alto”, explica Ildefonso Fernández, director de tecnología de IESA, empresa proveedora de soluciones informáticas para los administradores de fincas.
Como toda empresa que maneja datos personales de clientes, los administradores de fincas también son un objetivo potencial de los ciberdelincuentes y los costes derivados de sufrir un ciberataque son enormes, además del daño a la reputación corporativa. “A día de hoy se producen 200.000 muestras diarias de virus, el 18% reside en nuestros ordenadores más de 24 horas antes de ser detectados”, ha aclarado Fernández.
En este sentido, se necesita una solución de seguridad proactiva y, sobre todo, resulta fundamental contar con una buena política de backup. IESA resume en cuatro los consejos para hacer una copia de seguridad correcta de todos sus datos:
1) Contar con un proceso automático que no requiera intervención humana para evitar errores. Normalmente, cuando interviene una persona pueden darse olvidos, descuidos o fallos que pueden comprometer todo el backup. Por ello, es importante que esté programado y se realice sin intervención humana.
2) Debe ser completa y con la posibilidad de elegir el punto de restauración. De nada sirve un backup, si en caso de perder la información, no se puede recuperar toda o no se puede escoger la copia que se quiere restaurar. La copia de seguridad siempre tiene que servir para poder recuperar la información que queremos descartando el resto.
3) Fiable. Poder confiar en que los datos contenidos en la copia de seguridad coincide exactamente con los que estaban programados para guardar y poder recuperarla tal cual es imprescindible para que sea un buen backup.
4) Disponible cuando y donde se necesite. El almacenamiento en la nube y la posibilidad de recuperar toda la información en cualquier dispositivo garantizan que se pueda seguir trabajando y, por tanto, es un elemento indispensable en cualquier copia de seguridad.
Además, conscientes del valor de la imagen de marca y de la reputación que van aparejadas a la gestión de los datos, IESA pone a disposición del sector de la administración de fincas los servicios de backup y antimalware como complemento de su oferta tradicional.