Las nuevas tecnologías, los cambios demográficos y la aparición del comercio electrónico han repercutido en todos los mercados, incluido el Real Estate, transformando así el sector inmobiliario. En una industria tradicionalmente local y muy fragmentada, como lo es la inmobiliaria, los cambios han puesto en primer plano la necesidad de cambiar la forma de pensar para transformar los desafíos en nuevas oportunidades.
Salir de esta zona de confort, romper el paradigma clásico, modernizarse e involucrarse en el Big Data, en su momento, parecía casi imposible. No obstante, los cambios en los hábitos de consumo y las nuevas necesidades de los consumidores han abierto la puerta a nuevos factores de innovación. La clave para brindar experiencias diferentes es romper absolutamente los parámetros tradicionales del mundo inmobiliario.
Las tendencias tecnológicas que están revolucionando el sector inmobiliario
Las nuevas tecnologías que se están estableciendo en el mercado inmobiliario permiten ofrecer a los clientes una experiencia de compra totalmente digital y personalizada. Estos avances permiten a un propietario conocer el valor de su propiedad en cualquier momento y en cualquier lugar, ver el inmueble tras una reforma a su gusto y conocer el presupuesto al momento, y comparar los mejores créditos disponibles, por ejemplo.
En un sector tan competitivo, la intermediación inmobiliaria ya no es puramente transaccional, es un acompañamiento integral del cliente tanto en la toma de decisión como en los servicios de valor añadido (reforma y rehabilitación, financiación, decoración…) con la tecnología como eje vertebrador.
Con el big data se puede proporcionar información detallada sobre el historial de la propiedad, la zona, las cuotas de la hipoteca, el coste de la reforma e incluso predecir su futura revalorización, y con el block chain podemos gestionar las transacciones de una manera ágil, eficiente e incluso más segura, rastreando los registros para evitar falsificaciones, por ejemplo. En definitiva: agilidad, eficiencia y seguridad.
La innovación va mucho más allá y va ligada a la industria del entretenimiento. Dentro de muy poco, visitaremos los inmuebles como si estuviésemos dentro de la vivienda, lo que nos permitirá dar mucha más opciones al usuario y dar más movimiento al mercado inmobiliario de segunda mano con experiencias inmersivas en las que el potencial comprador puede ver como es el inmueble con una reforma integral y estimar los costes y el tiempo. Y todo ello mientras se divierte.
Las grandes modificaciones ya han comenzado a repercutir en el sector inmobiliario por lo que es necesario reajustar la estrategia de gestión que ha venido siguiendo el Real Estate hasta el momento. Los agentes deberán digitalizar su plataforma, alinearse con la nueva realidad y poder anticipar las expectativas para crear una mejor experiencia para sus clientes, con servicios de valor añadido como la reforma o la gestión hipotecaria.
Para que la innovación se integre en la estructura de las empresas tiene que ser rentable y eso pasa porque la tecnología ofrezca soluciones concretas, agilice procesos y facilite el camino. Y si además conseguimos hacerlo bonito y divertido, mejor que mejor.
La innovación es lo que define a un verdadero empresario y ahora es el turno del sector inmobiliario.