- Portales inmobiliarios online, redes sociales más visuales o clientes más jóvenes: algunos de los motivos por los que la impresión cautivará (o no) al posible cliente
- Según Idealista, casi la mitad de los millennials (47%) renovó su hogar en 2015, superando a otros grupos generacionales (40% entre 35 y 54 años y 45% entre los mayores de 55 años)
Ampliar los espacios de luz, colocar plantas, recuperar un sofá de la abuela, empapelar una habitación, vinilos… son algunos “trucos” que podemos utilizar para llamar la atención de los millenials. A la hora de decorar la casa para ponerla a la venta, es imprescindible tener en cuenta los factores que van a llamar la atención del comprador. Y dado que el primer momento en el que el comprador puede “enamorarse” de tu casa es cuando está viendo las fotografías en los portales inmobiliarios online, no podemos olvidarnos de una generación tan “tecnológica” como los millennias. Pero, ¿qué les llama la atención y cómo podemos atraerlos como compradores?
Si la casa que queremos vender no es nueva, tendremos que “maquillarla” lo mejor posible para este público joven. La suerte es que les encanta todo lo vintage, así que la edad de nuestro inmueble no es, a priori, un impedimento. Un “lavado de cara” será suficiente si conseguimos que los futuros compradores puedan ver mucho potencial en los diferentes espacios.
Además, debemos tener en cuenta que según un estudio de Idealista del año pasado, casi la mitad de los millennials (47%) renovó su hogar en 2015, superando a otros grupos generacionales (40% entre 35 y 54 años y 45% entre los mayores de 55 años). Este dato da una idea acerca de la importancia que el público joven otorga a la doctrina del DIY (Do It Yourself) y explica por qué valorarán el inmueble por la capacidad que éste tenga de adaptabilidad y transformación sin grandes reformas.
Housell, la inmobiliaria puntocom que ha nacido para ofrecer una nueva forma de vender inmuebles low cost, nos trae algunos trucos de decoración para ayudar a los propietarios a “preparar” su inmueble de forma que pueda ser atractivo para esta generación millennial:
- Plantas y flores
Las macetas de plantas y flores en lugares como el salón, el recibidor o al principio de un pasillo transmite la sensación de “hogar” al primer vistazo. Las plantas aportan frescura a los diferentes ambientes además de dar un toque de color que podemos amplificar con diferentes tamaños y colores de macetas.
*Foto: Silvia Pietruszka
- Muebles vintage:
Utilizar muebles de los años cincuenta o sesenta, aquellos que recuperamos de trasteros o sótanos de nuestros abuelos, es un fenómeno que atrae a la generación de los más jóvenes para decorar sus casas. Hoy en día, éstos se pueden combinar con muebles más modernos para generar un contraste muy atractivo. Una simple mano de pintura devolverá a la vida estos muebles olvidados.
*Foto: Tim Bright
- Colores neutros y pastel
La nueva tendencia de colores suaves y de tonalidades pastel aportan mucha luminosidad a las casas. Sobre todo en inmuebles donde no hay mucha iluminación natural. El rosa, el azul más turquesa, el verde agua, etc. son colores que los millennials utilizan para ofrecer ese toque más naïf que da un aspecto más hogareño a sus viviendas.
*Foto: Noah Silliman
- Espacios minimalistas
Ha quedado muy atrás la moda de recargar las estancias con muebles, tapicerías, cuadros y adornos en cada esquina. Demasiadas cosas que “roban” la luz y hacen los espacios más pequeños y estresantes. Habitaciones funcionales, colores claros y mucho espacio es lo que más demandan los millennials. Además de que este tipo de espacios y colores suaves aportan un ambiente más relajado a sus habitantes.
*Foto: Breather
- Ropa a la vista
Otra tendencia decorativa muy de moda entre los millennials es evitar armarios y espacios “cerrados”. Vestidores bien aireados y a la “vista” aportan mayor espacio y un toque muy moderno. Además de que nos obligan a no acumular demasiadas cosas en cajones. Cuanto más abierto sea nuestro hogar, más sensación de libertad, amplitud y tranquilidad.
*Foto: Priscilla Du Preez
“Vender una casa es una tarea que cada vez resulta más compleja dada la cantidad de oferta que hay en el mercado. Además, el comprador está cada día más educado en cuanto a gusto visual. Redes sociales como Instagram o Pinterest han hecho de la estética un valor clave para el ciudadano y éste es cada día más exigente. No podemos vender un inmueble sin tener en cuenta este cambio de paradigma”, comenta Guillermo Llibre, CEO de Housell.