Revista Inmueble | Noticias, información y actualidad sobre sector inmobiliario y derecho
Por Vicenç Ramón. Director – Gerente de RtV Grupo Inmobiliario
El sector de lujo se está reactivando básicamente por el ajuste de precios debido a la crisis, a la diferencia de tipos de cambio favorable para ciudadanos foráneos y a la disponibilidad de dinero en efectivo de los clientes inversores. El autor nos descubre al inversor de este tipo de inmuebles.
• El producto residencial más demandado de alto standing se halla ubicado en las zonas más exclusivas de las principales ciudades (Madrid o Barcelona) o en zonas con un gran atractivo turístico (Costa Brava, Islas Baleares o Marbella)
• Las características más solicitadas en vivienda de lujo son: la privacidad, un entorno privilegiado, acabados de lujo e instalaciones de ocio como piscina, saunas, zona spa, amplios jardines y excelentes vistas
• El perfil de comprador del mercado español es mayoritariamente foráneo, de Alemania, Gran Bretaña, Rusia y Francia; de mediana edad (de 35-50 años) y principalmente familiar
¿Por qué le afecta menos la crisis?
A raíz de la prolongada crisis que ha afectado de manera muy especial al sector inmobiliario, y al mercado español en particular, desde el año 2006, y cuya principal causa es la crisis financiera internacional, hemos podido observar cómo el sector inmobiliario se ha ido adaptando a la nueva realidad, transformándose de manera sustancial la mayoría de sus segmentos de mercado. Nada tiene que ver el segmento de la promoción residencial de los años 1990/2005 en España, con sus incrementos de precio anuales que en muchos casos superaban los dos dígitos con el existente en este mismo sector en los últimos 5-6 años, en los que ha habido una total parálisis y una pérdida de valor continuado (que nos vuelve a situar a precios de 2004), aparte de la desaparición de un porcentaje muy importante de sus principales actores (inmobiliarias, bancos, promotoras, etc ).
Excepción a lo expuesto es el segmento de la vivienda de lujo en zonas prime de las principales ciudades del mundo, que se han ido revalorizando año a año. El mercado residencial de alto standing a nivel internacional, por contra, está incrementando su actividad, básicamente por el ajuste de precios debido a la crisis, a la diferencia de tipos de cambio favorable para ciudadanos foráneos y a la disponibilidad de dinero en efectivo de los clientes inversores (no requieren de financiación).
La disponibilidad de productos muy exclusivos en excelentes ubicaciones y a un precio adecuado genera un creciente interés por parte de clientes con un alto poder adquisitivo, para la adquisición de este tipo de propiedades que se consideran por sus características como “activos refugio”.
Es obvio, no obstante, que la crisis también afecta al segmento inmobiliario de lujo (al menos en España), si bien ha sido el único que ha continuado con una cierta actividad también en estos últimos años de coyuntura recesiva: lo “exclusivo” y “único” se continua vendiendo a precios altos, pero se ajusta el precio en la parte relativa al “efectos especulativo” típico de los años de expansión.
La razón principal de que el sector de lujo se esté reactivando (en un escenario tan complicado para la mayoría como el actual) es que se considera que “ahora es el momento adecuado de comprar” muy buen producto (ubicación, singularidad, calidad, exclusividad, etc.) a precios mas ajustados y razonables. Obviamente, otras razones básicas son también la autofinanciación (el comprador de este segmento de vivienda de lujo lo hace mayoritariamente con recursos propios) y la globalización (parte de las inversiones residenciales de alto standing se efectúan por ciudadanos “nuevos ricos” de países emergentes y similares rusos, chinos, mejicanos, árabes, etc.) que han surgido a raíz del despegue económico de estas economías florecientes.
Así, si hablamos de las grandes ciudades a nivel mundial (Paris, Londres, Nueva York, Hong Kong,…) lejos de padecer el azote de la crisis financiera mundial, han visto como sus activos se revalorizaban en los barrios mas acomodados al paso que se desplomaba el resto. Esto se refleja en especial en las zonas mas lujosas de los países asiáticos, que es donde más se han revalorizado, consecuencia de la existencia de cada vez mas millonarios que se han lanzado a invertir en las zonas mas “exclusivas” y “seguras” de los países de su alrededor, como Hong Kong, Pekín, Shanghái o Singapur, pero también de capitales como Paris, Londres, Zúrich, Nueva York (Manhattan), Mónaco, Los Ángeles o Moscú.
Vivienda de lujo en España
Si nos centramos en el mercado español, el producto residencial más demandado de alto standing se halla ubicado en las zonas más exclusivas de las principales ciudades (Madrid o Barcelona) o en zonas con un gran atractivo turístico (Costa Brava, Islas Baleares, Marbella, etc.). Respecto a su tipología, las características más solicitadas comunes a la mayor parte de la vivienda de lujo son: la privacidad, un entorno privilegiado, acabados de lujo, instalaciones de ocio como piscina, saunas, zona spa, amplios jardines y excelentes vistas.
El perfil de comprador del mercado español es mayoritariamente foráneo, predominando la compra por parte de los nacionales de Alemania, Gran Bretaña, Rusia y Francia, si bien últimamente se observa un incremento de clientes asiáticos (principalmente chinos), sudamericanos (en especial mejicanos) y árabes (en especial al sur de España).
Es un comprador de mediana edad (de 35-50 años), principalmente familiar, con un poder adquisitivo medio-alto y alto, y que buscan este tipo de producto como segunda residencia (en el caso de costa mediterránea) o como inversión (si es en Madrid y/o Barcelona).
La venta de la vivienda de lujo es una venta personalizada, transparente y muy profesional, ofreciendo absoluta privacidad en la gestión y total confianza, y dándole un servicio global que incluya no solo la selección del mejor producto del mercado, sino el mejor asesoramiento en todos los ámbitos (jurídico-legal, gestión global-financiera, administrativo, inmobiliario, etc.).
En definitiva, la venta del mejor producto hay que acompañarlo de un asesoramiento global personalizado y de absoluta confianza.
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