Francesc Soler, Consejero Delegado de Principal 1ª, expone el porvenir del sector inmobiliario y las razones que están empujando al despegue, poniendo de relieve la venta y el alquiler. Aconseja a inversores apostar con regularidad por el mantenimiento de sus propiedades para afrontar riesgos y oportunidad.
Siendo 2015 el año de la recuperación y permitiendo a las familias volver a pensar en adquirir inmuebles mediante compra o alquiler, el próximo año se presenta con aires de optimismo tanto para inversores inmobiliarios como para particulares.
En palabras de Francesc Soler, Consejero Delegado de Principal 1ª, “las expectativas de inversión vuelven a ser optimistas debido a la corrección a la baja que ha tenido el sector inmobiliario en estos últimos años y a la apertura del grifo crediticio por parte de la banca”. Por ello apunta que el próximo será un buen año gracias al despegue que se ha producido en 2015. La oferta de alquiler sigue siendo amplia y la entrada de inversores tanto nacionales como internacionales, con espíritu de convertirse en empresas de carácter patrimonialista, hace que en zonas como Barcelona el parque de viviendas se vaya modernizando paulatinamente y, en consecuencia, se encuentren viviendas con altos niveles de calidad a precios asequibles.
Alquilar permite ahorrar unos costes fijos que sí se dan en la vivienda de propiedad. El Consejero Delegado aconseja ajustar el coste del alquiler para que no supere el 40% de los ingresos mensuales. Para aquellos que se planteen comprar, el grupo inmobiliario Principal 1ª subraya que este tipo de operaciones lleva aparejado el bloqueo de la cantidad que se invierte más los gastos e intereses correspondientes (las cuantías que se entregan a cuenta y las posteriores como pago de las cuotas de la hipoteca, si existe, se convierten en inversiones financieras que no se podrán recuperar hasta que se venda), así como la merma en la capacidad de endeudamiento (en caso de hipoteca si no se paga al contado). Al final habría que tratar este tipo de operaciones como inversiones financieras con un porcentaje muy bajo de liquidez. “Si se quiere alquilar en Barcelona, es importante delimitar el área en el que se quiera vivir, además de definir con exactitud la superficie y tener en cuenta los servicios que existen alrededor de la vivienda”, comenta Soler.
Para inversores inmobiliarios que tengan pensado invertir el próximo año, Francesc destaca la importancia de realizar compras a buen precio, invertir en el mantenimiento de sus propiedades con cierta regularidad y realizar estudios de mercado que les permitan calcular y obtener rentabilidad.