• Que mientras las entidades bancarias no “ liberen” el gran número de viviendas que se han adjudicado, no dispondrán de la liquidez necesaria para poder invertir de nuevo en el sector inmobiliario
• Que el "dramático" ajuste del sector de la construcción, ha supuesto ya, según la Confederación Nacional de la Construcción, la pérdida de más de un millón de empleos
• Que las medidas de reducción del déficit público que deberá adoptar el nuevo Gobierno, impuestas por Bruselas, impliquen una congelación de la inversión en infraestructuras, dificultando la reactivación del sector